Dudas, miedos, incertidumbre...
¿Y ahora qué?
Culpabilidad, porque yo... ¿soy la culpable, verdad?
Nunca pensé que me tocaría a mí, pero... ¿es para siempre?
Son sentimientos dolorosos por los que los padres pasamos cuando nos enteramos de la discapacidad de nuestros hijos, realmente es duro enfrentarte a una situación así.
Los primeros días todo es negación y entras en estado de shock. Te encuentras en una fase de crisis total en la que nada ni nadie te convence para seguir adelante, solamente el mirar a los ojos a tu hijo y pensar: "POR ÉL tengo que afrontarlo, es un ser indefenso y POR ÉL debo luchar y afrontar lo que venga".
También es cierto que los primeros días te sientes engañada. Los médicos te esconden lo que pasa hasta el último momento... ¿es que acaso se creen ellos con más derecho que yo que soy su propia madre?
¿Y la familia qué? ¿Cómo les digo a mis padres que su nieto tiene parálisis cerebral? Seguro que no me van a entender...
El doctor, como un témpano de hielo, lo primero que nos dijo fue: "Su hijo no va a poder andar nunca, y si lo hace, será con muletas."
En ese momento se derrumbó el mundo sobre mí, y no supe qué hacer ni qué decir.
Mi marido y yo nos miramos el uno al otro y no pudimos hacer más que tragar saliba mientras las lágrimas se escurrían por nuestras mejillas.
Al salir de la consulta nos esperaba la familia, deseosa de saber el porqué del ingreso del niño. Total... muchos niños nacen bajos de peso y tienen que quedarse en la incubadora. Pero ese no era nuestro caso...
YO: "Javi tiene parálisis cerebral".
ABUELO: "¿¡Que tiene qué!? Bueno, pero seguro que eso, con unos días en la incubadora se lo curan. Tu tranquila...".
YO: (sollozos) "Papá, el niño tiene un problema...".
Con el paso de los días, tras recapacitar fríamente, decidimos que aquello no podía ser un impedimento, para nada. Debíamos tomarlo como una realidad, NUESTRA REALIDAD.
Yo, entendía la discapacidad como algo negativo, pero ahora me doy cuenta de lo maravilloso que es descubrir, conocer y vivir una situación totalmente desconocida; y dar con gente nueva en tu misma situación con la que compartir vivencias, vivencias que no se alejan de las que podría tener cualquier otra familia...
miércoles, 21 de abril de 2010
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Chicas creo que vuestra sensibilidad no puede terminar aqui, y me encantaría que siguierais contando por las fases que pasa una madre(unos padres) ,cuando descubre que su cuento cambia.
ResponderEliminarY decir que la madre de Javi, es un ejemplo de tantas madres, que conocen la discapacidad de sus hijos, pero luchan por las capacidades de estos (que son muchas).
Para nosotras es un orgullo que nos animeis a seguir escribiendo...y como de eso se trata...por vosotros, los lectores..lo haremos.
ResponderEliminarMuchas gracias :)